Cap. 33: ALEJARNOS
Cap. 33: ALEJARNOS
Ricardo llamó a Guzmán apenas salió:
—Listo, ahora mismo te vienes porque nos vamos al puerto —trancó el teléfono y llamó a la niñera.
—Señora María, téngame listos a los niños que los llevó al parque de diversiones. Ah, póngales abrigos, por favor y usted se viene con nosotros.
Al llegar, ya la señora María y los niños estaban listos esperando.
Cuando bajaban, Eneida, con el teléfono celular en la mano, los detuvo.
—¿A dónde vas con los niños a esta hora?
Ricardo le dio la niña a la señora:
—Espéreme un momento en el garaje, ya estoy con ustedes —se quedó esperando que los niños terminaran de bajar.
Eneida levantó el celular y mirando a Ricardo retadora, tocó la pantalla y lo puso en altavoz. Se Oyó claramente la voz áspera e irritada de don Marcos decir:
—¿Qué hace Ricardo en la casa cuando debería de estar aquí en su compromiso?
Ricardo, de un manotazo le arrancó el celular y lo pagó.
—¡ERES UNA INCONSCIENTE!
—Ricardo, no me grites…
—Así es como mereces que