Mundo ficciónIniciar sesiónEl tentáculo se retorcía sobre Aerisport como una serpiente hecha de vacío.
Kael esquivó mientras una sección del edificio a su izquierda simplemente dejaba de existir. No se derrumbó. No explotó. Un momento estaba allí y al siguiente… nada. Como si alguien hubiera borrado esa parte de la realidad con una goma.
—¡Evacúen el distrito! —rugió a un grupo de Vigilantes más jóvenes, paralizados por el miedo—. ¡AHORA!
Por fin se movieron.
Gareth apareció a su lado, espada en mano, el rostro manchado de ceniza.
—No podemos herirlo —jadeó—. Cada arma que lanzamos simplemente… desaparece. Como s







