Cuando nos juntamos con mi padre y sus novios, le di un sonoro beso en las mejillas a mi papá diciendo
—Hola, papi, ya veo que estás en buena compañía y aquí escondidos, son ustedes unos picarones recalientes, papi fuimos a la empresa y ya vi tu oficina nueva, está genial
Su risa pícara se escuchó allí adentro, se escuchó un carraspeo y era la que tomaba los pedidos, lo hizo y se fue, entonces junto con Alessandro conversábamos nuestras anécdotas entre risas, Robert recibió una llamada de su tío, entonces se despidió de nosotros y regreso a su trabajo, como nosotros teníamos el auto llevaríamos a Serena y a mi papá de regreso a casa
Recordé el mensaje de mi tío Mijaíl y se lo mencioné
—Papá, mi tío Mijaíl me escribió pidiéndome de que lo llames, que tiene que decirte algo que es urgente y muy importante
Me observó con una cara de sorpresa y en ese mismo momento tomo su celular y lo llamo, nosotros escuchamos esa conversación porque en ese sitio se escuchaba hasta el mínimo sonido,