Annie.
12 horas después de la llegada a Thirwall .
No sé cuánto llevo aquí, pero estoy segura de que son más de 10 horas. Cada vez entran más personas, algunos me reconocen y dicen o grita con pánico "es la maldita de Stontalin” las personas que no sabían de qué hablaban fueron puestas al corriente ya que ahora se mantienen lejos de mí y murmuran a mi costa.
«Salgo de un infierno para meterme a otro. Perfecto simplemente perfecto»
La puerta es abierta y todos giramos para ver quién entra, pero ahora solo lo hacen guardias.
—Hagan una fila que verán al rey Thirwall, él sabe si se quedan o no llego, al rey no le gusta esperar. No lo miren a los ojos, no lloren, no griten y mucho menos hablen mucho—dice el guardia pelinegro.&nbs