—¿Declan…?
—Perdóname...—y es la primera vez que escucha a Declan sollozar.
Maylene abre tantos los ojos que ya no sabe qué hacer.
—Declan —lo llama, sufriendo junto a él.
—Todo fue mi culpa —éste calvario parece no terminar, porque Declan se aferra a su cuerpo para abrazarla. Abrazar su vientre