Amarillis
No podía continuar en la manada, sentía repugnancia por los cambiaformas, ellos eran producto de una mutación, que no era buena.
Ellos me querían para tenerme como una simple criadora, donde todos me usaban y yo me sentía terrible así.
Esa tarde, mientras Magnus estaba en la cocina, agarré un bate y lo golpeé en la cabeza, cayó y comenzó a sangrar. Los otros compañeros estaban de cacería y yo aproveché para huir.
Mi lobo interno, se había comunicado con Logan desde hace días, yo ya sabía que mi origen no era humano y seguía corriendo confiada en mi intuición, hasta que llegué al lugar donde mi hermano, me esperaba.
Contuve la respiración mientras me rociaba con demasiado perfume. Logan, mi hermano, me observaba desde la puerta. Tenía los brazos cruzados y la arruga de preocupación entre sus ojos parecía más profunda de lo habitual.
Era el hombre lobo más grande que había conocido, y ninguno de nosotros era de talla pequeña. Incluyéndome a mí.
Logan y yo teníamos la misma pi