La mamá de James se acerca a Ángela, su rostro enrojecido por la ira.
— ¿Cómo te atreves a ponerle una demanda a mi hijo? — grita.
El abuelo se levanta de su silla, intentando calmar la situación.
— Por favor, cálmate — pide el abuelo.
Pero la mamá de James no se calma.
— No puedo calmarme cuando se trata de mi hijo — replica.
Nikolai se acerca a Ángela, protegiéndola.
— Porque tu hijo no es una Santa Paloma — dice Nikolai.
Ángela se suma.
— James es un criminal, por eso lo denuncié — afirma Ángela.
La mamá de James se lanza hacia Ángela, queriendo pegarle, pero Nikolai se interpone.
— No te atreves a tocarla — advierte Nikolai, sujetándola por los brazos. — No sabes de lo que soy capaz.
La mamá de James se zafa retrocediendo con la mirada oscura de Nikolai que se ve muy peligroso..
— ¿Cómo es posible que defiendas a esa... — comienza.
Nikolai la interrumpe.
— Porque mi primo es más mi enemigo que mi familia — dice Nikolai. — Por eso la defiendo más a ella. Ángela vale más que tú, tu