178. ¿OTRA TRAMPA?
Escuché atentamente, mis ojos reflejando la lucha interna que libraba. Entendía todos los motivos que me había planteado mi tía Josefina y ahora Ivory, suspiré entre mi deseo de hacer justicia y el interés familiar.
—Gracias, Ivo —susurré, besando su frente—. Tu apoyo significa todo para mí. En verdad, veo que lo que dice mi tía es cierto: la familia por parte de padre no merece arrastrar las secuelas de los crímenes de mamá. Lo pensaré cuando la vea, si es verdad que despertó y está tan enferma como dicen. Quizás la interne en una institución mental. Tampoco quiero que te afecte a ti; suficiente con lo que esas locas de Geraldine y Eleonora han dicho sobre ti.
Nos quedamos en silencio por un momento, reflexionando sobre los desafíos que nos esperaban. La sombra de Amaya aún se cernía sobre nosotros, y las otras dos mujeres que no renunciaban a mí eran otro de los obstáculos que Ivory tendría que enfrentar.
De repente, una pregunta surgió en la mente de Ivory, alimentada por su