Me jugaste una mala, cabrón, pero así es esto, lo sé. ¡Quiero que me entregues al hijo de la chingada que mató y quemó a mis hijas
mañana mismo, hijo de puta! Quiero matarlo con mis propias manos.
Ante el comentario, el Panemas se acercó a Mario y preguntó:
—¿Qué sucedió,Mario ?
—Sucedió que valió madre, Panemas. Han matado a mis hijas por tu culpa y por culpa de este hijo de lachingada.
El Torque sacó su arma, la apuntó hacia la cabeza del gobernador, y expresó con coraje:
—A mí no me vengas con esas tonterías, cabrón. ¡Aquí mismo te trueno, hijo de la chingada! Nosotros no fuimos los que matamos a tus hijas, si estás con nosotros, mañana mismo te entrego al hijo