—¿Por qué no hay nadie? — preguntó Samantha con una sonrisa y muy emocionada.
—Porque esta noche es nuestra, y quiero hacerla lo más especial posible. — Samantha no dejaba de sonreír de lo especial que se sentía.
—Eres increíble — dijo dándole un pequeño beso. — con razón te iban a dejar entrar. — Matthew se encogió de hombros.
—Quiero demostrarte lo especial que eres para mí y de lo mucho que te amo, ven vamos — agarrados de la mano, caminaron hasta dentro del restaurante, por un lado tuvo miedo por ver tanto silencio y soledad en ambiente, Matt la llevaba hacia la zona VIP, y no no podía negar que tenía una sensación rara en su estómago.
Matt, tenía los nervios de punta, quería que todo fuera perfecto y especial, a pesar de todo lo malo que estaba