La mujer la miró un poco asustada, porque Sophi tenía cara de quien es perfectamente capaz de cumplir una amenaza, y enseguida salió corriendo de allí.
Ella suspiró con molestia.
—¿Por qué siempre tiene que haber una falda rondándote? —gruñó mientras le levantaba la cabeza, y él le sonrió con aque