POV: AIRYS
Siete largos días pasaron sin ninguna noticia, sin su presencia. Nada. El vacío a mi alrededor parecía asfixiante. Estaba allí, sola, en aquella habitación enorme, rodeada por su aroma y por una irritación creciente.
— Felicidades, Airys. Otro Alfa huyendo de tu vida. — Murmuré para mí misma, rodando los ojos.
La rutina se resumía en ser llevada al hospital, donde una médica loba, aparentemente perdida, me daba órdenes. Después, me traían de vuelta a esta prisión de lujo bajo una vigilancia constante. Dos guardias se turnaban para vigilarme, como si fuera un peligro inminente.
Me detuve frente a la puerta, encarando a Jasper, que parecía más una estatua inexpresiva.
— Quiero volver a mi antigua habitación. — Crucé los bra