POV: SOPHIE
Era un sueño escuchar sus risas con la boca llena de pastel y los ojos llorosos; su ligereza y suavidad llenaban mi corazón. Conan estaba aquí, de vuelta a casa, de vuelta a mis brazos, donde lo abrazaba con miedo de perderlo nuevamente.
— Tía, ¡estás haciéndolo de nuevo! — Dijo, aun riendo.
— ¿Haciendo qué? — Arqueé las cejas, divertida.
— Mirándome, ya te lo dije, estoy bien. — Conan rodó los ojos, al estilo de Agatha cuando algo la molestaba.
Me reí ante tanta similitud; mi sobrino me miraba frunciendo el ceño, tratando de entender el motivo de la risa.
— ¿Qué tal si vamos al lago sagrado? Necesito curarme, y tú, jovencito, necesitas un baño. — Toqué su nariz, idéntica a la de su padre.
— ¿Lago sagrado? — Parecía curioso y al mismo tiempo temeroso. — ¿Por qué tenemos que ir allí?
— No te preocupes, mi pequeño valiente, es solo un lago bendecido por la Diosa Luna, donde el poder de curación es más intenso… Como híbridos, nuestra cicatrización no es tan rápida como la de