13. Peligroso trato
Debe haber un error. ¿Cuántas personas en el mundo tienen ese mismo nombre y apellido? Tal vez sólo sea una coincidencia.
Pero el rostro de Issie está paralizado y se ha quedado sin habla también. Angelina observa que la mujer simplemente sonríe con amabilidad. No hay porqué alarmarse.
—Señora Vitelo —empieza Issie tragando saliva y acercándose hacia Angelina, pasando sus ojos hacia la nueva mujer—, disculpeme, no la había visto.
—Está todo bien —responde Chiara con una voz suave y amable. Luego sus ojos viajan hasta Angelina. Estira su mano hacia ella—, es un placer. Soy Chiara Vitelo, trabajo en esta compañía. No esperaba verte tan pronto.
Angelina observa su mano y no espera para estrecharla por mera cortesía.
—Angelina De Santis.
—Oh, sí. Sé muy bien que eres —Chiara da un apretón con la misma suavidad y da un paso hacia atrás—, felicitaciones. Acabo de enterarme que Giancarlo es tu esposo. Vaya, algo impresionante pero, mil felicitaciones.
Tiene que tomarse de las manos por