En el Restaurante Paella.
Noah pasó a casa de Alissa puntual a las siete en punto, la mujer con un espectacular vestido ceñido al cuerpo, en color rojo despampanante como siempre, su cabello negro suelto y unas joyas que por si solas llamaban la atención.
-Hola Ali, tan hermosa como siempre, dijo Noah como todo un caballero, esa noche le había dado libre a Oscar, él personalmente conduciría esa noche.
Sabes, estoy antojado de una paella, ya sabes, siempre que vengo por acá deleito mi paladar.
-Si corazón, lo sé, ¿recuerdas cuando íbamos a Valencia únicamente a hacer el amor y deleitarnos con una paella?
-Siempre recuerdo nuestros viajes con cariño, dijo Noah siendo sincero, él le tenía aprecio verdaderamente a la chica.
Ella con un suspiro lo miró sintiéndose la dueña del mundo, por tener a aquel hombre a su lado invitándola a cenar.
Mientras tanto en el apartamento de Emma, Massimo llegaba puntual, vestido con un traje negro que lo hacía verse bastante atractivo, Emma como siempre hermosa luciendo su vientre