Emma sabía perfectamente bien que la cafetería era de Noah, sin embargo ella estaba cansada de que se burlaran de ella con tal descaro, así que las chicas que siempre estaban preparadas con ropa de fiesta en la clínica, para cualquier salida que se presentara, se vistieron ahí mismo, dejando su uniforme en las bolsas que pusieron en el auto de Emma, un poco de maquillaje y listas para la fiesta.

-Emma, ese vestido se te ve hermoso, dijo Raquel.

Emma con un vestido corto, su cabello recogido en una coleta y unos zapatos de tacón, estaba lista para la acción.

-Gracias Raque, tú te ves muy bella.

Las chicas llegaron al Kopi Luwak, que en la noche una de sus áreas se convertía en uno de los centros nocturnos más prestigiosos del país lugar en donde iba la farándula a disfrutar de un buen trago y de música en vivo.

-Hola Emma, que gusto volver a verla, dijo Armando el guarda de seguridad, que conocía a la chica, porque había tenido en alguna ocasión un problema con el tonto de Ernesto, si