CAPÍTULO 110 — Extra II.
Anastasia.
—Por fa… cuídate mucho, no soy yo la que está contenta con esta salida tuya…
—Vamos, Má… son mis dieciocho… los tiempos han cambiado, y no quiero un pastel en la mesa.
Asentí de forma seria, y tomé sus mejillas para besarlas.
—Que la pases genial… te amo un montón.
Mikhail salió de la mansión, mientras me asomé en los ventanales enormes, y estaba chocando su puño con Alex. Él le tomó de la nuca para darle un abrazo a media, y le dijo algo en el oído, golpeándole el hombro.
Mi chico grande tomó su camioneta nueva y salió, batiendo su mano, mientras la puerta se abrió, para que el rostro de Alex apareciera ante mí.
—¿Preocupada?
—Mucho…
—Es un hombre.
—Es mi chico… —Alex torció los ojos y luego se sirvió un vaso de bebida.
—No es tuyo… pronto también se casará y emigrará de aquí… y nos quedaremos solos, de nuevo… —Alex me sonrió sentándose en el sofá y negué.
Pero de inmediato me fue hacia él y abracé su cuerpo.
—Nunca imaginé esta vida…
—¿Querías otra?
—Imaginé