"Isidoro"
Finalmente de vuelta en casa. Diez días en ese hospital habían sido demasiado. Aunque fue bueno, para que tuviera tiempo de pensar y analizar las cosas. ¡Ah, Ilanita, hiciste una gran cagada! ¡Y me dejaste muy enojado contigo y tu familita de mierda!
Ni siquiera estaba enojado por gastar una fortuna arreglando la puerta que el delegado rompió, él salvó mi vida, si la policía no hubiera estado al acecho estaría bajo tierra ahora. Fue una suerte para mí, pero una gran desgracia para Ilana y su mami y su papi. Me las pagarían muy caro.
—¡Listo, señor! —El muchacho que estaba colocando el vidrio en la puerta se acercó, el trabajo había quedado muy bien. Le pagué y se fue.
Ahora tenía otro compromiso y no perdería tiempo. Fui a la oficina, abrí la caja fuerte y saqué el sobre. Guardé eso por tantos años, sabía que tarde o temprano me serviría y la hora había llegado. Puse el sobre en la carpeta y fui a la delegación. Le daría una declaración bien larga e interesante al noble d