"Samantha"
Después de una mañana llena de emociones y de pasar mucho tiempo en compañía de mi padre, era hora de prepararme para la boda. Poco después del almuerzo llegaron maquillador y peluquero. Hebe había convertido una de las muchas habitaciones de la casa en un ambiente para que pudiera prepararme para mi gran día junto con las chicas.
Cuando estuve lista, me miré en el espejo y quedé impresionada. Estaba completamente encantada con mi vestido. Era ligero, de un tul bordado casi como un encaje intrincado y muy fino, tenía el cuerpo ajustado hasta la mitad de los muslos y se abría en un estilo sirena, con una falda ligera y con poco volumen. El escote era en V, con tirantes finos y en la espalda desnuda un escote que llegaba hasta la mitad de la columna. Era hermoso y delicado, todo forrado con una tela nude que le daba al vestido un aspecto más off-white que blanco.
Mi cabello fue arreglado en un moño bajo despeinado, con rizos sueltos cayendo en el lateral, adornado con orquí