Jackson Johnson
Estacioné el auto frente al local, miré por el retrovisor y miré el auto de Jacob estacionándose detrás de mí, bajamos y nos quedamos en la acera.
— ¿Entonces? —Jacob preguntó al acercarse hasta a mí.
—Prefiero no desvelarme, ¿Qué tal si cenamos y platicamos aquí? Me ha llegado un salmón a la parrilla y tienes que probarlo. —asintió a mi propuesta. Entramos al restaurante y él se sentó en la barra, entré a la oficina y me encontré con Salma, mi gerente de lugar.
— ¡Johnson! —Exclamó sorprendida al verme, —Pensé que vendrías hasta mañana.
—He venido con mi hermano. —ella sonrió.
—Perfecto, ¿Se quedarán a cenar? O… ¿Probar de nuevo el salmó