Mundo ficciónIniciar sesión—Atlantic nos dijo que os conocisteis en la biblioteca. ―Empezaba el interrogatorio. Jan sonrió sin sentirse presionado lo más mínimo por la afirmación de mi padre.
—Sí, aunque habíamos coincidido antes, pero no llegamos a hablar ni presentarnos propiamente —admitió con una seguridad que yo desde luego no tenía en esos momentos. ¿Hacía falta sacar a coalición la noche del ataque y ser tan malditamente preciso?
―Eso no lo sabíamos.
―Bueno, es posible que ella no le diera mucha importancia a nuestro encuentro. ―Al menos no fingió que no le presté atención, porque era imposible que mis padres no recordaran, también a aquel enorme lobo de pelaje dorado―. Si creen en el destino, creo que él fue el que se aseguró que volviéramos a cruzarnos.
Mi madre sonrió, aunque no llegó a decir nada. Era de las







