Alexander miró a Tara desde su lugar, ella comía tan concentrada que notó algo que le llamó la atención.
— ¿Vas a querer ir a dar la vuelta? ¿Cómo una pareja de enamorados? —Tara asintió al dar el último trago a su jugo de naranja. —Perfecto. ¿Qué te vas a poner para salir? No quiero que el sol les dé tanto, estaría bien un pantalón y una blusa que cubra toda tu pálida piel, recuerda, los rayos ultravioletas pueden hacer daño.
Tara entendió que se habí