101. POLLO FRITO Y PROBLEMAS.
POV. CARMEN.
— ¿Qué haces?
— Me escondo.
— ¿Por qué?
— Estoy cansado — dijo con los ojos casi cristalizados, las manos a lado y lado de su cabeza y soltando el aire como si cargará el peso del mundo.
— ¿Tú estás cansado? — Volví a preguntar como si no le creyera, porque de verdad no le creía nada.
— Se que no lo parece pero…
— Felipe — dije lentamente antes de que mi ojo derecho comenzará a saltar por el mal genio.
— Lo sé, lo sé, no puedo quejarme por nada de lo que hice hoy… — me senté a su lado y suspire.
— Sí, sí puedes quejarte, yo me quejo todo el tiempo — tome su mano y sonreí.
— No quiero ni imaginar cuando ellas crezcan, esto va a ser…
— Una guerra — reí.
Entonces el tiempo pasó y la vida fue… Bueno la vida fue la vida…
Sí, yo no había sido siempre la princesa de mamá, más bien tuve que ser una guerrera de mamá, ayudarla y salir adelante era como una ley de vida para mi no dejarme vencer y no tener miedo y tampoco tenía derecho a quejarme o a llorar por las noches cuando me