Por Kelly
Se acerca a mí y a todo su aplomo y su seguridad, se le suma su mirada, su piel y su pasión y ya no huyo de sus brazos.
Ya no quiero nada sin él, pero tampoco quiero que sea muy fácil para él, tenerme.
Comenzamos a besarnos y solo existimos él y yo.
La noche crece al son de nuestro amor, lo siento mío y entiendo que yo solo vivo si estoy a su lado.
Sus besos me recorren el cuerpo y el alma.
Nuestros cuerpos están tan unidos que solo somos uno.
Explotamos de placer, es él y solo él quien es dueño de mi amor y de mi vida, me da un placer que nunca pensé que existiría, y me lo brinda sin medida.
Todo resultó mejor de lo que Carla esperaba, Gastón le dijo que lo mejor era casarse.
Ella aceptó gustosa.
Carla estaba enamorada de Gastón y al parecer era verdad que él tenía miedo y fue solo por cobardía que no la llamó.
Los hombres muchas veces son impredecibles.
A muchos les sorprendió cuando les llegó la invitación del casamiento de nuestros amigos.
El casamiento se llevó a cabo d