Capítulo 47

Lucien

A medida que descendíamos, la vegetación se hacía más densa y el aire más cálido. El cambio de ambiente era un alivio después del frío y la aridez de las montañas.

—Mira, —dijo Octavia, agachándose detrás de un tronco caído y señalando hacia adelante. —Allí hay personas.

Siguiendo su mirada, observé a un grupo de hombres en medio del bosque. Estaban cazando un ciervo grande, y nos mantuvimos en silencio, ocultos, observando sus movimientos.

Los cazadores se movían con una precisión y silencio impresionantes. Estaban vestidos con ropas de camuflaje que se mezclaban con el entorno del bosque, haciéndolos casi invisibles entre los árboles y la maleza. Cada paso era calculado; se movían con un propósito claro, acechando a su presa con una paciencia casi sobrenatural.

El ciervo, majestuoso y ajeno al peligro, pastaba tranquilamente. Su pelaje marrón y su imponente cornamenta lo hacían destacar entre el verdor del bosque. Los cazadores, escondidos detrás de arbustos y árboles, espera
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App