Capítulo 154: Jamás de un amigo.
Victoria miraba a su madre, Lorenzo se lo había dicho, la mujer no había querido regresar con su padre ni su hermana y ella sentía su corazón dolerse, la había extrañado tanto, aun cuando ella nunca la defendió, entendía muy bien porque razón era aquello, no la odiaba, ni siquiera estaba enojada con ella, después de tantos años, frente a ella se hallaba la mujer que le dio la vida, y a la que amaría por siempre.
— Hija, yo. — dijo aquella mujer de cansada mirada.
Victoria no la dejo terminar de hablar cuando caminó hasta ella para abrazarla, había extrañado tanto aquello; de aquellos días de infancia la recordaba a ella y a su dulzura, sus tés de manzanilla con miel, las tartas que con el amor de madre le cocinaba para premiarla por sus buenas notas a escondidas de su padre y hermana, recordaba los cuentos, las cosas buenas…no quería recordar las malas.
— Mamá, te extrañe demasiado. — dijo Victoria con sinceridad.
Aquella amable mujer, la había abrazado también, la había extrañado tan