capitulo 21: Odio y dolor profundo.
Verlos a ambos frente a frente era ver dos guerreros implacables enfrentados, envueltos en una atmósfera pesada, oscura y fría, lo que parecia ocasionar a su alrrededor una explosión de pequeñas partículas de fuego que inundaban el ambiente y que parecía ser el inicio de un gran incendio de odio, resentimiento y dolor, profundo dolor.
En la mirada de aquel anciano solo había una cosa, odio profundo, desde lo más recondido de sus entrañas, como si frente a él no estuviese su hijo, sino el más vil enemigo.
-¿Porque papá, porque me odias así? - dijo Zamir viendo como su padre tenia el entrecejo arrugado.
-¿qué haces aquí? - respondió el anciano quitándole la mirada y volteandose camino al lugar donde había pasado los últimos 10 años, su habitación.
- Se que fuiste tú, no intentes ocultarlo y esta vez, fue más grave qué antes, no lo dejaré pasar papá. - lo vio hacer un gesto de desagrado.
- Haz lo que tengas que hacer - sentenció.
En ese instante los guardias del Zamir ingre