UNA REINA EN EL CORAZÓN DEL REY. CAPÍTULO 35. No quiero estar sin ti
Para el peso y la fuerza que tenía el carácter de aquella mujer, era increíble lo poco que pesaba su cuerpo. Hasan levantó a Giulia como si fuera una pluma y se giró hacia Karim.
—Ya sabes lo que tienes que hacer —le dijo y un segundo después una camioneta se estacionaba frente al edificio del Parlamento y Hasan se subía a ella con Giulia en sus brazos.
El corazón le latía como un tambor dentro del pecho, y ver que ya estaba demasiado cansada como para pelear con él lo asustaba aun más.
—¡Vamos, nena, me juraste que ibas a estar bien! —la regañó sacudiéndola y la escuchó suspirar.
—Estoy bien, solo tengo sueño porque llevo muchos días sin dormir, cuidando tu real trasero —protestó Giulia y a él le importó muy poco delante de quién estaban, solo le dio un beso en los labios y le suplicó que fuera fuerte solo un poco más.
El mismo Mustafá condujo de regreso a Palacio y para ese momento ya los médicos reales los estaban esperando. El palacio contaba con la mejor clínica del país, así que