Nueve meses después, Macarena fue trasladada de inmediato al hospital, donde tendría a los bebés. Tanto Richard como Danilo permanecieron en la sala de espera, muy nerviosos por saber cómo estarían las criaturas.
En un momento, Richard le dijo a Danilo:
- No sé qué hacés aquí todavía, si yo me encargaré de cuidar a los bebés.
- Ella no me pidió que me largara – le dijo Danilo, encogiéndose de hombros – mientras no me despida, seguiré con ella.
- ¿Y qué vas a hacer si los bebés no son tuyos? ¿Eh? ¿Los aceptarías, así como así?
- No haré nada. Lo único que hará largarme de aquí si me despide… o deja de pagarme.
- ¿Pagarte?
- ¡Claro! ¡Ella me paga para protegerla!
- No entiendo. ¿Por qué le pag