87. Un...
Capítulo 87. Un amanecer diferente.
En el departamento de Santiago las cosas no estaban tan mal. Luego de haber hablado por algunos minutos, el silencio los invadió.
El silencio de la ciudad contrastaba con la calma del lugar.
-- Vamos a la habitación cariño – le dijo Santiago, ella le había dicho que estaba exhausta y él quería que descansara bien. Pero apenas cerró la puerta de la habitación, Paula se giró y lo abrazó con una fuerza que lo desarmó.
Sus labios buscaron los de ella con urgencia, con una mezcla de necesidad y alivio. El beso fue profundo, sin palabras, con todo lo que habían callado durante semanas. El cuerpo de Paula temblaba entre sus brazos.
Santiago la sostuvo en sus brazos con delicadeza, pero con la intensidad de un hombre que había estado a punto de perderlo todo... caminó con ella hasta el lugar donde estaba la cama. Esa que muchas veces había sido testigo de la pasión de la pareja, la misma que había visto llorar al hombre de piedra.
Santiago dejó caer sobre l