Capítulo 58: La vida antes de ella.
Christian Walker
Podría decir que, ayer fue un rotundo éxito, jamás hubiese esperado que mis hijos reaccionarían así. La verdad es que cuando Samanta me abrazó, una extraña calidez nunca sentida me embargó.
Vi los ojitos temerosos de Ángel y por un momento creí que él no quería acercarse, pero no fue así.
Solo fue cuestión de que él confiara un poco en mí y todo cambió, no puedo negarlo, abrazarlos, besarlos, sentir sus manitas aferradas a las mías, es toda una nueva experiencia.
Definitivamente, me he perdido de esta maravillosa sensación, me maldigo internamente por no valorar lo que tenía hace años.
Flor se ha mantenido distante, se ha mantenido callada. Hubo un momento en que la vi cómo se fue al baño, me preocupé cuando pasó el tiempo y no vi que regresara, así que fui a buscarla, cuando aquello sucedió, la interacción fue incómoda.
- ¿Estás bien? -pregunto al verla distraída.
- Si… Vámonos, ¿Dónde están los niños? -me responde con una frialdad que solo yo sé que significa, ya q