CAPÍTULO DIECISEIS
2 de Octubre de 2018
Abrí mis ojos a las siete en punto de la mañana cuando escuché como picaban al timbre. Me froté los ojos y tomé unos segundos para levantarme y ponerme una bata. Bajé las escaleras y mi madre apareció por detrás de mí con la intención de hacer exactamente lo mismo.
Abrí la puerta. Eran Tessa y Elliott. Vestidos de negro.
— ¡Mierda! — Dije en voz alta. — Se me ha olvidado.
Mi madre los saluda desde arriba y rápidamente vuelve a la cama. Sin apenas ofrecerles entrar, lo hacen, y se sientan en el sofá.
— Voy a darme una ducha, ¿vale? Enseguida bajo.
Corrí a meterme en la ducha y me até una coleta. Me puse un vestido negro