Mundo ficciónIniciar sesiónAl entrar Matilda notó lo fría que se veía su habitación, hace un tiempo no entraba pero todo se mantenía de la misma manera, claro, Mariano visita pocas veces esta casa y no siente que deba invertir mayor tiempo aquí, así que no es tan personalizado como en su departamento.
Mariano se dirigió a cambiarse para ponerse cómodo y ella lo esperaba desde el balcón viendo la inmensidad de los jardines. Era una vista realmente majestuosa. Imaginaba como serían los días en un espacio tan grande. Definitivamente algo de soledad, al no haber miles de habitantes en la mansión pero eso daba cierta paz, sin ruidos ni interrupciones… y jardines inmensos con todo el espacio para horas de descanso o caminatas.
Momentos después llegó Mariano, “¿te gustan los jardines?” Se notaba en el rostro de Matilda lo mucho que disfrutaba de estos espacios.
Matilda sonríe, “mmm sí… ¿cómo fue tu infancia aquí?” No pudo evitar preguntar.
Mariano mira hacia fuera y recordó







