—¡Ouuu ouuuu! Estoy llorando... ¡Pronto me convertiré en un plebeyo en La Ciudad! —dijo Dereck, llevándose la mano a los ojos como si estuviera llorando.
Todos sabían que estaba siendo sarcástico. Dereck quitó la mano de inmediato y sonrió.
—Bueno... jajaja... buen primo —le dio unas palmaditas en e