—Podríamos llegar a ser muy cercanos —respondió él.
Mariana se rio. —Pero yo no quiero ser tan cercana a ti.
—Mariana —dijo él, pronunciando su nombre de repente.
Esto hizo que Mariana se sintiera aún más incómoda.
Ella se había disfrazado, y él insistía en que ella era Mariana, la famosa Misteriosa 7.
¿Qué clase de persona era él? ¿Qué pretendía acercándose a ella?
—No soy Mariana —Mariana intentó mantener su identidad secreta.
Él simplemente sonrió y abrió la cerveza, dando un gran trago.
Tragando con fuerza, asintió. —¿Tú no eres Mariana?
Las palabras de Manuel no hicieron sentir cómoda a Mariana.
Ella planeaba dar otra vuelta a la pista. Ya que había venido, quería disfrutar.
—¿Otra carrera? —preguntó Mariana a Manuel.
Manuel se encogió de hombros, evidentemente sorprendido de que Mariana quisiera correr de nuevo. —He bebido.
Mariana esbozó una sonrisa irónica. ¡Tsk!
Mariana se alejó y volvió a la pista.
Manuel se quedó bebiendo, observando la carrera de Mariana.
Parecía que Marian