Cap 80. ¡Estás despierta!
Amaris abre los ojos lentamente. Un suave zumbido le retumba en los oídos mientras parpadea, tratando de ubicarse. La tenue luz del atardecer entra por la ventana, y cuando su visión se aclara, ve tres rostros borrosos inclinados sobre ella. Uno de ellos, más cercano, toma su mano con suavidad.
—¡Estás despierta! —exclama Mavina, con un suspiro de alivio.
Selena, qué está a su lado sonríe emocionada. Junto a ellas, de pie y con el ceño fruncido, está el príncipe Edward. Sus ojos están clavados en Amaris, pero esta vez no hay arrogancia en su mirada. Hay preocupación genuina.
—¿Qué pasó...? —murmura Amaris, sentándose con lentitud. Su cuerpo se siente pesado, como si hubiera corrido durante horas, y su mente sigue atrapada entre las imágenes del otro mundo. Las calles desconocidas. La biblioteca. El rostro de Brígida. Su cabello corto. La ropa extraña.
—Nos diste un buen susto —dice Selena con suavidad—. Te buscamos durante horas, casi nos quedamos sin voz de tanto gritar tu nombre, y