El Sábado Elena disfrutó del día con las niñas en especial con una pequeñita de tres años, le estiró los brazos para que la alzara y no se despegó de ella, jugó con ellas comieron helados y postres, Elena disfrutaba de los días que venía aquí estaba la familia con la que creció y sus instintos maternos se avivaban sobre todo con las más pequeñas, en la tarde se fueron a la casa de Elena, hubieron algunas lágrimas sobre todo de las más pequeñas, a Elena siempre le partía el corazón esta parte, pero con la promesa de que pronto volvería finalmente salieron, Elena con su bolso con ropa para tres días y Belinda con uno igual o más pequeño.
— ¿Estás segura que es todo lo que vas a llevar para un mes?
— Sí, Elena voy a trabajar, es suficiente, aunque debo conseguir un vestido para la beneficencia.
— En verdad me gustaría que pasaras una temporada con nosotras, cuando te dije qu