CAPÍTULO LV. TEMOR
Gael
Me encontraba fuera del Palacio cuando escuché las fuertes pisadas de un caballo acercándose a toda velocidad. Neil se había ido hacía poco al castillo de los Poyner y yo planeaba visitar el pueblo, para dar una vuelta por los alrededores del caserío. Pero esos planes cambiaron cuando vi a Silver correr directo hacia donde yo estaba, cerca de las caballerizas.
De inmediato, supe que algo no iba bien. Anissa se había ido un par de horas antes a la pradera para practicar su magia y, por supuesto, fue con Silver. Ahora la yegua regresaba sola y estaba sumamente alterada.
Me alejé de la entrada de las caballerizas apenas la vi, sintiendo cómo el ritmo de mi pulso aumentaba gradualmente, mientras mis cejas se juntaban. Silver se apresuró hacia mí, inqu