- Esto no es un sueño. - Dije con seriedad.
En cuanto nuestros rostros se acercaron, oímos un suave golpe en la puerta, que nos apartó. Catriel sacudió la cabeza con disgusto y fue a atender.
- ¿Luca?
Lucca entró en la habitación, seguida por Odette. Catriel me escondió detrás de su propio cuerpo, no quería que su hermano me viera sólo en toalla.
- Tenemos que ir a la sala de reuniones. La policía está aquí y quiere hablar con nosotros. - Anunció el príncipe más joven.
- ¿La policía? ¿Por qué motivo? - Catriel estaba sorprendido y al mismo tiempo curioso.
- No tengo la menor idea. Pero tampoco estoy dispuesto a esperar demasiado para averiguarlo.
- Vamos para allá. Espera a que Aimê y yo nos hayamos cambiado de ropa.
- ¿De acuerdo?" Miré a Odette desde detrás del cuerpo de Catriel.
- "I... No estoy segura.
- ¿No? -arrugué la frente.
- "Tienes que mirar tu teléfono. Y las noticias del día.
Sentí un escalofrío recorrerme la espalda.
- "Nos vemos en quince minutos", advirtió Lucca.
Apena