Mundo ficciónIniciar sesiónAlessia vio el amanecer por la ventana de su habitación. Durante tres largos años, había esperado vivir ese momento: casarse con el hombre que amaba, el hombre más rico y guapo de la ciudad. Extrañamente, el único sentimiento que afloraba en su pecho era la desesperación.
Miró el vestido colgado en la percha, tan hermoso, y recordó que no lo había tocado desde que lo dejaron allí. El día anterior, insistió en que Carlota no regresara, diciendo que se sentía mal debido a la ansiedad.
Alessia no podía encontrar una solución a su problem







