Una vez que me calme lo mire a los ojos, se veía preocupado.
-Perdón por preocuparte-
El negó con la cabeza en un movimiento suave.
-¿Quieres contarme que paso?-
Acaricio mi mejilla limpiando mis lagrimas con su pulgar.
-Samanta, la mamá de Zach, tiene cáncer...- mi voz se corto-
-Dios, ¿Y Zach y el...el lo sabe?, porque lo vi hace rato y se veía contento-
-No aún no se lo dice, ella quería pedirme algo cuando fue a verme a la panadería. Ella quería que yo...me convierta en la mamá adoptiva de Malena, Elías y David. Y no tuve la fuerza para negarme, no puede negarme a eso-
Volví a llorar y el me abrazo fuerte, besando mi frente con fuerza.
-Se que debía haberlo consultado contigo primero. Somos una familia, no debí tomar esa decisión sin ti-
-Mi amor, tu lo dijiste, somos una familia y ellos son parte de nuestra familia. Nada me haría más feliz que poder ser parte de su vida-
-¿No estas enojado?-
-No mi amor. No estoy enojado, solo quiero que me digas. ¿En que puedo ayudar?