Capítulo 887
Gabriela miró a los ojos de Rodrigo y, sintiéndose culpable, apartó la mirada.

¿Habría dicho algo sin sentido anoche estando borracha?

¿Le dio a él alguna ventaja para amenazarla?

De lo contrario, ¿por qué parecía tener esa intención?

¡Pensó detenidamente y no recordaba haber hecho nada que pudiera enfadarlo!

No importa.

O tómalo con calma primero.

Sonrió y dijo: —Está bien, iré contigo.

La mirada de Rodrigo era inescrutable: —¡Vamos!

Dijo, saliendo primero.

Gabriela lo siguió.

Ya en el coche, se sentó junto a él y le preguntó en voz baja: —Ayer, cuando estaba borracha, ¿te enfadé?

—No —respondió Rodrigo.

Gabriela suspiró aliviada.

¡Pensó que lo había molestado!

—Entonces, ¿por qué quieres que te acompañe a la oficina? No entiendo tu trabajo, no puedo ayudarte...

—Con que estés conmigo es suficiente —dijo Rodrigo, acercándose a su oído con voz grave. —¿Sabes cómo me torturaste anoche?

Gabriela abrió los ojos de par en par.

¿Ella lo torturó?

¿Cómo?

—Estás loco, ¿cómo podría haberte tort
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP