Jacob instantáneamente se sonrojó ante sus palabras y tartamudeó mientras intentaba defenderse: “¿Quién dijo que le estaba pidiendo dinero a mi querido yerno? ¡¿Dije eso?! Tengo otras razones para hablar con mi querido yerno. ¡No hagas acusaciones falsas contra mí!”.

En lugar de discutir con Jacob, Elaine se volvió hacia Charlie y dijo: “Mi querido yerno, escuchaste lo que dijo. No importa lo que esté tramando, ¡no le des ni un solo centavo!”.

Jacob se enfureció de inmediato y exclamó enojado: “Elaine, ¿por qué estás así? ¿Por qué siempre hablas solo de dinero?”.

Elaine sacudió la cabeza en broma y sonrió cuando dijo: “¿Qué pasa? Ya que no le estás pidiendo dinero a mi querido yerno, ¿por qué te molesta si le digo que no te dé nada?”.

Jacob se quedó sin palabras. La fuerte defensa de Elaine había frustrado sus intenciones por completo. Con sus palabras, ya no se atrevía a pedirle dinero a Charlie. ¿Cómo podría hacerlo, después de haber sido puesto en tal situación?

Jacob, que esta