131. FORASTEROS DE OTRO MUNDO
NARRADORA
—¿Pero has visto o no a una Selenia? —Edmund preguntó frunciendo el ceño.
Los tres se habían sentado a negociar alrededor de la mesita de centro.
—No las hemos visto personalmente, pero sé muchas cosas de esa raza, solo… —Edgar, el vampiro de cabello oscuro, se quedó dudando.
—¡¿Pero qué?!... ¡Hablen claro!
—Sabemos de las Selenias a través de las palabras de esa mujer… — Marius, el vampiro de cabello rubio, habló entre dientes.
Parecía el jefe, o al menos fue la impresión que le dio a Edmund.
—¿Me estás hablando de la vampira que los traicionó? —el Rey Hechicero intentaba atar cabos.
La historia de estos dos hombres era un tanto peculiar.
Habían sido encontrados por uno de sus guerreros, cerca del bosque prohibido detrás de su palacio.
Harapientos, heridos, moribundos.
Edmund los mantuvo prisioneros porque se dio cuenta de que no pertenecían a estos continentes.
Habían atravesado uno de los tantos portales ocultos en estas tierras.
Enseguida descubrió sus peculiaridades cua