No. ¿Cómo sería posible?
Mateo encontró graciosa la idea. ¿Cómo podía estar relacionando a Valentina con aquella deslumbrante fundadora?
"Señor Figueroa, ¿puede llevarme?"
Hace un momento Valentina estaba junto a su auto, pidiéndole que la llevara.
Mateo sonrió. Ella ya tenía su propio auto pero decía esas cosas a propósito, solo para molestar a Luciana.
Y también para provocarlo a él.
Esta mujer se estaba volviendo cada vez más atrevida.
En ese momento, Luciana, Dana y Catalina subieron al auto. Luciana en el asiento del copiloto, Dana y Catalina atrás. Mateo pisó el acelerador y el Rolls-Royce avanzó suavemente por la carretera.
Luciana realmente no podía aceptar que Valentina tuviera un Rolls-Royce igual al de Mateo. ¿Quién se creía ella para conducir un Rolls-Royce?
Luciana preguntó:
—Mateo, ¿Valentina está gastando tu dinero otra vez?
Dana añadió:
—Señor Figueroa, cuando se divorciaron, ¿le dio mucho dinero a Valentina? De lo contrario, ¿cómo podría permitirse un Rolls-Royce?
La m