A mediados de enero, Theo partió a Inglaterra a estudiar.
Lucas personalmente lo acompañó, y se quedaría allá varios días, esperaría hasta que Theo se adaptara antes de regresar a Palmas Doradas.
El equipaje lo prepararon Rafaela y Susana juntas.
En Inglaterra hacía frío, Rafaela le preparó a Theo muchos conjuntos de ropa abrigada, llenó completamente dos maletas grandes. Por suerte era un avión privado así que no importaba llevar mucho, y allá también había un apartamento muy bueno, con dos empleadas dedicadas para cuidarlo, y un chofer para salir.
Esto lo había arreglado Lucas, porque Theo no tenía 18 años.
Susana suspiró aliviada, temía que él pensara que los chicos debían ser independientes, que debían sufrir, y que esos dos volvieran a pelear. Ella le preparó muchos libros a Theo, estos libros eran difíciles de encontrar en Inglaterra, y si los enviaba por correo tampoco era conveniente, así que escogió varias decenas para que leyera allá despacio.
Al final, sus dedos tomaron una