Nathaniel se tendría que dividir en dos para estar cerca de sus dos bebés, nunca se imagino estar viviendo algo tan terrible, no quería dejar a su hijo solo en esas condiciones pero tenía que volver y cuidar del que estaba ya en la habitación
— Quiero que dejes a dos enfermeras cuidando permanentemente de mi bebé mientras no estoy aquí, que sean las mejores y que no se les ocurra descuidarlo por qué no lo cuentan, yo estaré viniendo todo el tiempo — le ordenó el mafioso al médico
Nathanael regresó a la habitación, Jael estaba cargando al bebé, se había despertado por qué ocupada un cambio de pañal, pero el tío Jael no tenía idea de que hacer
— El bebé parece estar incómodo, Nathanael, ¿ya comió?
— Si, ya comió, tal vez está mojado, dame acá y pásame un pañal de la maleta — El padre estaba acostumbrado a los niños gracias a Ethan y Liam, le quitó el pantalón y el pañal mojado, tomó uno nuevo y listo, ya lo había cambiado
— Vaya, si que eres experto con los bebés, lo dejaste como nuevo