13. Regresando al aula
La mañana del miércoles llegaba veloz, pero para David era un martirio. Había pasado todo el fin de semana obsesionado recordando esa mirada decepcionada que parecía reclamarle el haberse dejado llevar por los encantos de Natalia.
El inicio de semana fue un poco más llevadero por que las clases le mantenían distraído. Ahora no tenía idea como iba a enfrentar lo que le esperaría en el salón de taller de diseño. ¿Samantha lo evitaría? ¿Continuaría como en la última clase? ¿O ahora lo atormentaría por ser un maldito infiel?
David se recriminaba a sí mismo, por meter el asunto de la fidelidad, como si tuviera algo que ver con Samantha, ¿era eso? ¿quería algo con ella y por eso veía cosas donde no las había? Si esa mujer le temía desde el principio, no había posibilidad de que le reclamara por estar con alguien más. A lo mejor hasta lo prefería. ¿Entonces por qué se veía tan decepcionada? Esa mirada triste lo había marcado tan profundamente que no le había dejado en paz.
Llegó al salón