Al escuchar la respuesta de Arturo, Celine asintió. "Ah, son una nueva secta. Bueno, ¿qué puedo hacer por ti hoy?".
Arturo sonrió y habló con un tono cortés: "Mi Maestra de Secta ha escuchado sobre la Diosa Doctora en el Valle de las Cien Flores y estaba asombrada por sus conocimientos y habilidades. Por lo tanto, me enviaron para invitarla a la División Arce para un intercambio".
¿Un intercambio?
Celine sonrió ligeramente al escuchar esas palabras y dijo con un tono divertido: "No conozco a tu Maestra de Secta. Además, no me apetece hacer un viaje largo. Creo que tendré que rechazar la invitación".
Celine estaba a punto de hacer un gran avance con su cultivo. Quería superarlo y no quería ir a ninguna parte hasta conseguirlo.
Más importante aún, ella no sabía ni tenía nada que ver con esa recién establecida División Arce. No tenía ningún interés en conocerlos.
El rostro de Arturo se enrojeció de vergüenza ante su rechazo, pero aun así forzó un tono suplicante: "No diga que no tan