El lunes temprano por la mañana, Valentino ya estaba en su oficina su nuevo asistente Jhon Mendoza, había resultado ser muy eficiente en su trabajo y de confianza por lo que el CEO estaba muy satisfecho con su desempeño, ellos revisaban la agenda del día, tendrían un día muy ajetreado, reunión tras reunión y juntas por videollamada
Más de pronto la secretaria entró a darle un recado, una bella señorita lo estaba esperando en recepción, pedía verlo con urgencia
— CEO Lombardi, que le digo a la señorita, dijo llamarse Estefanía Cardona, y que usted ya sabía de quién se trataba, ¿le permito pasar o le pido que se vaya? — preguntó la profesional mujer
— Dígale que se vaya, estoy a full este día, no tengo tiempo para nada ni para nadie, mucho menos para ella, si creé que lo que le hizo a mi esposa se me ha olvidado, está muy equivocada — dijo el CEO, con molestia evidente
La secretaria iba a dar el recado, el empresario y su asistente habían vuelto a lo suyo, solo que la rubia entró por la